jueves, 7 de enero de 2016

Penang con niños

Estas Navidades no hemos ido a España, y nos hemos visto con unos amigos que conocimos en Hong Kong y se marcharon el año pasado, en Penang-Malasia. 

La verdad es que Penang es un destino que nunca hubiera elegido. Hay muchos sitios para visitar en Asia, y es difícil elegir. Pero nunca me había llamado la atención. Nos lo propusieron los otros amigos, ya que con su pasaporte, allí no les pedían visa. Pero tengo que decir, que me ha sorprendido gratamente de haber ido, y que me encantaría repetir en el futuro.



Este viaje, era un viaje por y para los niños, así que todas las actividades eran en torno a ellos.

El hotel que estuvimos es el Hard Rock Hotel de Penang. En un principio, me decepcionaron un poco las habitaciones, ya que eran más pequeñas de lo que me habían parecido en la web, y un poco viejas, pero la verdad, es que las zonas comunes estaban muy bien para niños, y la comida también. La piscina tenía tres toboganes, con lo cual con eso nos asegurábamos que los niños no quisieran salir del hotel para nada (arma de doble filo, porque para salir a alguna excursión las negociaciones eran duras). La playa en esa zona no es bonita, y aunque si fuimos para montar en el banana boat, no era como para pasar el día allí.
El kids club era un poco pequeño y anticuado, así que no querían quedarse allí. Pero el teen club era el sueño de cualquier niño! Dos wiis, un mini cine, dos ordenadores con conexión a internet, mesa de billar y futbolín...sí, allí acabaron conociendo muy bien a nuestros hijos.

Tengo que decir que sin duda lo mejor del hotel es el excelente trato de todos y cada uno de los trabajadores. Súper amables, siempre con una sonrisa y si les pedías ayuda para algo lo daban absolutamente todo. Los niños estuvieron como en casa allí. Repetiría sin duda.

Básicamente, alternábamos un día de piscina y hotel, y un día de excursión. Si tenéis niños, sabréis lo difícil que es salir con ellos cuando el plan no les parece atractivo, pero más o menos pudimos ver bastantes cosas, y salir a comer y cenar fuera del hotel.

La comida riquísima, y bastante barata. El último día nos atrevimos a comer en un food court en la calle, que allí hay en cada esquina, y a pesar del aspecto, que hace que te lo pienses dos veces si vas con niños, ellos cenaron de maravilla y pagamos un 25% de lo que hubiéramos pagado en cualquier restaurante. Lástima que no nos hubiéramos atrevido antes.

Lo que más disfrutaron los niños fue la visita a Escape. Un parque multi aventuras pensado para niños. Aunque nosotros lo pasamos mejor que ellos! Tirolinas, puentes colgantes, camas elásticas...el sueño de cualquier niño. Además había una zona recreativa con juegos tradicionales, como los bolos, diavolos, uniciclos...Y lo mejor es que durante ese tiempo hicieron mucho ejercicio y no se acordaron para nada de pedir el móvil para jugar.








http://www.escape.my/

Otro día que fuimos a George Town, fuimos a un museo que todo está boca abajo. Nos reímos mucho haciéndonos las fotos. Sólo lo han abierto hace 4 meses y el personal dentro era muy profesional.

Pero sin duda, el paseo estrella en George Town es Armenian Street. Bueno, los niños protestaron y protestaron, pero yo no he visto en la vida un sitio tan bohemio y tan bonito. Las paredes hablan y solo transmiten buen rollo. 

Es un museo en la calle de arte auténtico. Artistas de todo el mundo, previo concurso y votación, decoran las paredes de esta calle, pero lo más bonito es que son pinturas que se mimetizan con el entorno y que respetan la arquitectura. Es difícil tener una pintura favorita, la verdad. Pero el conjunto, es una preciosidad. 

Ernest Zachaveric, es uno de los artistas que más murales ha hecho. Me ha sorprendido ver lo joven que es. 
Aquí podéis ver un video con el proceso de creación de un mural suyo, que es mi favorito.



Y unas cuantas fotos de nuestro paseo, aunque es difícil seleccionar pocas.







Y por lo demás, paseos, comidas y cenas en la calle, mercadillos, y los niños se apuntaron a un masaje. 


Una experiencia buenísima, aunque sin duda, lo mejor de lo mejor fue la alegría de los niños al verse, después de un año. 

No siempre es fácil decir adiós a los amigos, pero el mundo no es tan grande ¿no?



No hay comentarios:

Publicar un comentario